La ficción es el mundo aquél donde el escritor volca toda su inventiva y crea mundos paralelos con personajes increíbles y sentimientos extraños; tal es su minuciosa descripción que a menudo nos hace dudar de lo que es realidad o ficción. Hace poco se estrenó en formato 3D la película "Viaje al centro de la tierra", un film que es la traslación de la magnífica novela de Verne a una historia actual de poco impacto en el público a no ser por lo snob que suena el término 3D; sin embargo, hubo una parte que me llamó la atención al momento de verla; cuando el sismólogo Trevor Anderson (Brendan Fraser) descubre que el lugar donde se encontraba era exactamente igual a la locación que Verne hacía énfasis con un detallado esfuerzo. Cosas como esas, ponen a pensar hasta que punto la ficción puede resultar en algo ciertamente verdadero; si es que en realidad existen tales descripciones en alguna parte del planeta, debajo de ella, encima, quién sabe. Esas bondades solo podemos dejarla a grandes como Verne, y en parte es mejor darle el beneficio de la duda que limitarnos a decir que no es posible. Las grandes novelas siempre nos han dejado sembrado esa extraña duda y curiosidad por saber de dónde sacaron esos elementos que se entretejen de manera exacta y natural para dar en fruto una obra de magistral envergadura. En tierras peruanas algunos meses atrás el tema de la ficción y la realidad se manoseó "tanto" con la historia de Bayly y el actor Diego Bertie (involucrado "íntimamente" en todo un capítulo de su primer éxito literario "No se lo digas a nadie") que la resaca de que hasta qué punto es cierto todo lo que se dijo en el libro sigue aún vigente. ¿Realidad o ficción? Dejémoslo ahí por el momento.
Entomología forense
Hace unos días, en Finlandia se capturó a un "presunto" delincuente gracias a la ayuda de un mosquito. El ADN de la sangre succionada por el mosquito encontrado en el coche permitió a la policía capturar al sospechoso. El auto había sido robado días atrás y no se tenía noticias de su paradero, ni de ningún responsable. El auto fue encontrado por los policías días después de su robo y fue registrado con tal minuciosidad que llegaron a dar con un mosquito, el cual fue separado para el análisis respectivo en el laboratorio. El caso puede registrarse dentro de lo que se conoce como "entomología forense", una suerte de estudio que se hacen a los mosquitos para determinar, por ejemplo, cuanto tiempo de muerto tiene una persona, o en el caso de la policía, para determinar a quién pertenece el ADN encontrado. Como en Finlandia existe lo que se conoce como ficha genética con información del ADN de las personas, es fácil realizar las comparaciones para dar con un presunto asesino, delincuente o violador. Este es un caso que en estas partes del planeta suelen conocerse como "curiosidades" o un tipo extraño de procedimientos policiales, sin embargo es un ejemplo claro de que la realidad muchas veces supera la ficción. Este tipo de casos sui generis son los que alimentan las tramas más enredadas y orgásmicas de la literatura moderna, con sus hiperbólicas excentrecidades y sus incalculables curiosidades. Cosas como éstas hay un montón y sirven para nutrir ese inmenso mundo que hay para compartir, para entretener, para distraer, o en el mejor de los casos, enseñar.
Entomología forense
Hace unos días, en Finlandia se capturó a un "presunto" delincuente gracias a la ayuda de un mosquito. El ADN de la sangre succionada por el mosquito encontrado en el coche permitió a la policía capturar al sospechoso. El auto había sido robado días atrás y no se tenía noticias de su paradero, ni de ningún responsable. El auto fue encontrado por los policías días después de su robo y fue registrado con tal minuciosidad que llegaron a dar con un mosquito, el cual fue separado para el análisis respectivo en el laboratorio. El caso puede registrarse dentro de lo que se conoce como "entomología forense", una suerte de estudio que se hacen a los mosquitos para determinar, por ejemplo, cuanto tiempo de muerto tiene una persona, o en el caso de la policía, para determinar a quién pertenece el ADN encontrado. Como en Finlandia existe lo que se conoce como ficha genética con información del ADN de las personas, es fácil realizar las comparaciones para dar con un presunto asesino, delincuente o violador. Este es un caso que en estas partes del planeta suelen conocerse como "curiosidades" o un tipo extraño de procedimientos policiales, sin embargo es un ejemplo claro de que la realidad muchas veces supera la ficción. Este tipo de casos sui generis son los que alimentan las tramas más enredadas y orgásmicas de la literatura moderna, con sus hiperbólicas excentrecidades y sus incalculables curiosidades. Cosas como éstas hay un montón y sirven para nutrir ese inmenso mundo que hay para compartir, para entretener, para distraer, o en el mejor de los casos, enseñar.
Acercar la ficción a la realidad, jugar con ellas, tener dominio y al mismo tiempo dejarse llevar por sus mareas que te embriagan y atrapan: son gruesas formas de intervención del escritor en un mundo donde la realidad resulta chica y la ficción un apartado dudoso.